jueves, 14 de enero de 2010

Dragon Head (2003)

Si hay algo que se le puede criticar al cine japonés es que es muy... japonés. No me refiero a su estilo en sí, sino más bien a su afán por cerrarse al resto del mundo. Japón es un país bastante racista y una forma de darse cuenta es viendo sus películas que rara vez son "universales", pocas veces parecen estar hechas para un público general. Muy por el contrario, es necesario ser japonés para entender y disfrutar por completo el cine que ellos hacen.

Dragon Head es una de esas cintas hecha por y para los japoneses. Con casi dos horas de duración y una trama muy simple, la película está basada en un manga (cómic japonés) que relata las desventuras de una pareja de jóvenes mientras intentan sobrevivir a un cataclismo de proporciones mundiales que no sólo los deja sin agua y sin comida, sino que además los deja sin un atisbo de civilización, porque los personajes que van encontrado en su travesía, si bien siguen siendo humanos, han perdido por completo su humanidad, consumidos por la desesperación.

No es una película para los amantes del género "desastre" (terremotos, inundaciones, erupciones volcánicas, etc.) a pesar de estar ambientada en este mundo post-apocalíptico; es más bien un drama emocional y un viaje de madurez para que un chico débil se convierta en hombre y una niña chillona en mujer.

¿Lo más rescatable? Lo minimalista de todo; los efectos especiales no son espectaculares, los actores no son demasiado talentosos, la historia no necesita ser compleja para atraparnos.

¿Lo más negativo? Que el ritmo sean tan... ¿japonés? Porque si yo editara la película le cortaría unos 20 minutos para dejarla más concisa. Ah, y además le quitaría algunas de las escenas donde Teru, el protagonista, se cae, tropieza o está con la cara enterrada en el polvo, porque llega a ser molesto verlo tan torpe para moverse y pasar tanto rato en el suelo.

Sólo para los más fanáticos del cine sombrío japonés y de las películas que hablan del fin del mundo. No apta para ser vista sin buena compañía con quienes comentar los diálogos o contar cuantas veces Teru se cae o Seto, la chica, está llorando.

Lobo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustó la reseña... No soy muy fana del cine oriental, aunque no he visto muchas películas para decir que me gusta o no me gusta. Pero que alguien se digne a realizar este tipo de reseñas es un comienzo, al menos en una peli como la gente puede que me atrape ^^
Muchas gracias!!

Lobo dijo...

Gracias por tu comentario; la idea es que te hagas una idea y descubras el tipo de cine que más te gusta, para seguir explorando más y más películas.