miércoles, 2 de noviembre de 2011

Kari-gurashi no Arietti (2010)


El mantra dice que "si viene del estudio Ghibli, entonces debe ser bueno"y al fin me tomé el tiempo para ver esta película. La pequeña Arrietty (así se escribe en la versión española) lleva una vida común y corriente junto a sus padres: le gustan las flores y plantas, tiene su propio jardín y ayuda a su mamá en los deberes de la casa; su padre se encarga de salir a buscar todo lo necesario para sobrevivir. Una vida normal para la familia Clock; lo que los hace especiales es que miden apenas 10 centímetros de altura.

Basada en la mundialmente adorada novela "The Borrowers" (Los Incursores) de Mary Norton, es la historia de una familia que subsiste tomando prestadas cosas del mundo humano, cosas que sus dueños no van a extrañar por estar botadas o abandonadas pero que para estos diminutos seres son elementos vitales como un alfiler o un pedazo de pan. Por supuesto, su pequeño tamaño los deja indefensos ante nosotros (los humanos) así es que tienen por regla jamás dejarse ver y por eso viven debajo del techo y entre las paredes de una casa de campo.

El casual encuentro entre Arrietty y Sho, un niño humano, desencadena una serie de problemas que cambiará la vida de la familia Clock para siempre. Ese es el viaje emocional que Ghibli nos invita a ver en esta ocasión, lleno de toda la magia que uno acostumbra a ver en sus películas, aunque sin los elementos místicos de casi todas sus entregas anteriores. Esta vez la música delicada y la animación detallada son el escenario para una historia casi-de-amor entre nuestros protagonistas.

Simplemente hay que verla porque está basada en un clásico de la literatura infantil, porque fue la película más vista en Japón el 2010, porque es apta para todo público, porque los críticos la adoran o porque es del estudio Ghibli. Elige una.

Lobo.

PD: esperando ahora con ansias Kokuriko-Zaka Kara y la nueva Porco Rosso.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Hanna (2010)

No sé ustedes, pero a mi me encanta cuando un director européo casi desconocido logra contratar a un par de buenos actores famosos para hacer una cinta casi independiente que puede pasar totalmente inadvertida por las carteleras o las ceremonias de premiaciones, pero que se queda en la retina del afortunado cinéfilo que por esas cosas del destino logra verla.

Ese es el caso de Hanna, una cinta que toma elementos ya conocidos pero los presenta con una serie de actuaciones viscerales y totalmente crudas. Desde los experimentos secretos de gobierno hasta la chica entrenada para ser una asesina, pasando por el matón experto en realizar el trabajo sucio que la CIA no puede hacer y no dejando de lado al personaje bizarro que tiene una aparición breve pero memorable, la cinta está llena de cada cliché conocido en el cine de acción, pero (para sorpresa mia) ¡funciona!

Pero cuidado: no funciona porque la trama sea tan interesante ni la acción tan novedosa, sino porque los personajes son brillantes y las actuaciones de Eric Bana y Cate Blanchett son perfectas, aunque claramente el mayor logro es de la actriz titular Saoirse Ronan, en el papel de Hanna. Es imposible no quedar hipnotizado por sus ojos celestes y su mirada fria, ni quedar extrañado por la mezcla de acentos e idiomas que logra dominar. Fascinante.

El punto final se lo dedico a la música, compuesta por The Chemical Brothers especialmente para la película. Es directa, es parte de la trama (Hanna desea conocer la música) y en una escena en particular se entrelaza con las imágenes de personas haciendo ruido en la calle. Es simplemente perfecta.

La recomiendo a todo mundo, incluso si no te gusta el cine de acción: mírala por las actuaciones, por la fotografía impresionante o por la música vertiginosa.

Lobo.

sábado, 20 de agosto de 2011

Source Code (2011)

Al señor Philip K. Dick hoy en día lo recordamos principalmente gracias a la gran cantidad de películas que se han basado en sus escritos. Source Code se suma a esa larga lista.

Esta vez tenemos a un soldado (Jake Gyllenhaal) cumpliendo órdenes en un programa experimental del ejército: su misión no es detener al terrorista que ha plantado una bomba en un tren, sino sólo encontrarlo. No puede detenerlo porque la bomba ya explotó, el tren ya descarriló y las víctimas están todas muertas. Su misión es revivir una y otra vez el atentado, como en un sueño, tratando de encontrar al criminal. En su viaje lo acompaña Christina (Michelle Monaghan) y aunque ella no tiene idea de lo que está sucediendo, también forma parte de todo este "plan" para salvar vidas.

Es una historia dramática ambientada en un universo de ciencia ficción donde "nada es lo que parece" y el final inesperado es tan bizarro que el cierre de la película es perfecto para toda esa ambientación.

Recomendada para los amantes del trabajo de Dick, aunque ni siquiera sepan que han visto sus historias convertidas en películas.

Lobo.

martes, 19 de julio de 2011

True Crime (1999)

A veces es divertido encontrarse con una película totalmente desconocida, sobre todo si se trata de una obra protagonizada y dirigida por uno de los más grandes entre los grandes. Así es que aprovechando el tributo a Clint Eastwood en Rango, permítanme hablarles acerca de True Crime.

Es una cinta basada en un libro y eso es todo lo que necesitan saber. O sea, el ritmo de toda la historia y la predictibilidad del final son tan obvios que el verdadero y único placer de ver esta película es averiguar cómo va a lograr Everett que le perdonen la vida al reo sentenciado injustamente a morir (por inyección letal) a sólo horas de que lo ejecuten.

La historia de este periodista mujeriego, alcohólico rehabilitado y enemigo de varios políticos es triste, dura y fácil de seguir; quizás por eso no me convencieron las pocas escenas dramáticas que tiene Clint, ya que su especialidad es ser el hombre duro y cínico.

De todos modos la película no es mala (la música sí); el mayor mérito es ver las escenas conmovedoras de un excelente Isaiah Washington, quien interpreta al reo a punto de morir; es una pena que ese buen actor haya desaparecido en el anonimato de los papeles secundarios de la televisión. Sólo por ver sus escenas, yo recomiendo esta película.

Lobo.

jueves, 14 de julio de 2011

Rango (2011)

Por lo visto los grandes estudios le pegaron a Nickelodeon y a Industrial Light & Magic una mala costumbre: hacer una película con un estilo y promocionarla con otro que sea más popular. Rango tenía toda la apariencia de ser una comedia animada para niños, cuando en realidad es un western, una película del lejano oeste, con una trama y un nivel de diálogo que definitivamente no son para niños pequeños. Claro, el sentido del humor sigue ahí, pero tampoco es lo que uno espera.

Todo eso lo aclaro para decir lo siguiente: quedé muy gratamente sorprendido con esta aventura compleja que rinde tributo a todos los western clásicos, con personajes que claramente se parecen a los estereotipos más reconocibles de todas esas cintas de los famosos spaghetti western, como el villano que guarda un misterioso parecido con Lee Van Cleef.

Rango es la historia de un camaleón que busca su lugar en el mundo y lo encuentra en el más inesperado de los lugares, un desolado pueblo en medio del desierto. A partir de ahí el "forastero" se convierte en sheriff y en héroe para sacar de la desesperación a la sufrida gente del pueblo. Pero el camino no es fácil, pues tendrá que lidiar con los "villanos" que intentarán apoderarse de la riqueza de la gente. Es una trama clásica de western, con sus momentos tristes y sus tiroteos, pero que además agrega un elemento de humor negro que sorprende a cada rato.

Los personajes tienen un estilo increíble, con un diseño que se sale de toda norma "infantil", ya que son feos, sucios, peludos y simplemente grotescos, pero claramente el personaje titular sobresale por encima de todos: Rango es Johnny Depp, y Johnny Depp es Rango. Multifacético, con una variada calidad actoral y deliciosamente impredecible. Vean la película en inglés para reir con los acentos y modismos de estos personajes geniales. Es una película más que recomendada.

Lobo.

sábado, 9 de julio de 2011

Transformers: Dark of the Moon (2011)

Robots inteligentes peleando para proteger o destruir nuestro mundo; un chico que está buscando su lugar en la vida; una modelo capaz de ser sexy y estilosa a la vez; un director que al fin aprendió a dejar quieto el encuadre; una película de Transformers que pone fin a la trilogía.


Este capítulo final en la saga dura más de dos horas y con la ayuda del 3D logra ser entretenida y visualmente impresionante; según uno de mis profesores ahora me tendré que comprar retinas nuevas... Aunque es por supuesto tan predecible como merece ser una producción hecha en base a una línea de juguetes japoneses.

Entre la acción de los robots y el humor de los humanos la película es muy entretenida, si dejamos de lado todos los errores internos e incongruencias con la trama de la primera película (¿la verdadera razón porque Megatron vino a la tierra?) y pasa a ser así, tal vez, la mejor de las tres entregas.


No hay mucho que hablar de ella, sólo hay que verla, pero de preferencia en inglés original para escuchar la voz profunda y serena de Leonard Nimoy, como el antiguo líder Sentinel Prime, un hombre que ya tiene experiencia en ese universo, pues fue la voz de Galvatron en la película animada de 1986.

Sólo para fans de la saga y de los efectos especiales.

Lobo.

lunes, 27 de junio de 2011

Sucker Punch (2011)

No conocía este cómic, así es que nunca lo leí, pero esta película me dejó con todas las ganas de hacerlo... hasta que sí vi la película.

Y es que lamentablemente el señor Snyder tiene un talento innegable para traspasar las páginas de una novela gráfica a la pantalla grande sin dejar de lado detalle alguno; el problema es que con eso ya no es necesario leer la obra original, porque ya no quedan elementos sorpresa para recompensar al lector. Está todo en la película.

La cinta es un verdadero viaje mental, con imágenes surreales, efectos visuales impresionantes y un estilo gráfico digno del trabajo de Snyder. Lamentablemente la historia es tan ténue y su trama tan simple que no hay desafío alguno al querer disfrutarla, mucho menos entenderla. Así, su gran mérito es indudablemente la imagen en si misma, con todos sus mundos y criaturas imposibles.

La protagonista es Baby Doll (Emily Browning), quien relata y lidera toda la acción en Sucker Punch, con su look de colegiala sexy y espada de samurai, pero mi personaje favorito fue Blue (Oscar Isaac), un villano "de película". Es una cinta entretenida y visualmente absorbente que no deja mucho después de terminar, excepto la sensación de haber participado en el viaje más loco de todos.

Lobo.

viernes, 3 de junio de 2011

Pirates of the Caribbean: On Stranger Tides (2011)


Por fin, Jack ha regresado. El pirata favorito de todos se apodera de la pantalla nuevamente para alivianar los saldos negativos que algunas cintas han dejado en las arcas de Disney (Zemeckis tiene la culpa, dicen ellos). Por supuesto, este esperado retorno a la pantalla tiene todo lo que queremos ver: aventura, peleas con espadas, criaturas sobrenaturales, personajes que no pueden haber existido en los tiempos de los piratas y mucho humor de la mano del eternamente ebrio capitán Jack Sparrow.

Continuando con su aventura anterior, Jack y demases intentan dar con la legendaria fuente de la juventud, que el mismo Ponce de León tratara de encontrar. Por supuesto, las escaramuzas para dar con el mapa, encontrar la fuente, aprender el hechizo, escapar de los buenos o malos (según sea el caso) y además quedarse con el hombre o mujer de sus sueños nos da más de dos horas bastante entretenidas. No olvidemos mencionar a Gibbs y Barbossa que afortunadamente volvieron para darle a Jack caras conocidas con quien pelear. Por motivos de fuerza mayor, además, la vi en 3D (no había una versión "normal" hablada en inglés).

Conozco a unas pocas personas que no han visto ni siquiera la primera parte, o que no están interesadas en este tipo de películas en lo absoluto; para ellos, mi recomendación es seguir lejos del alcance del capitán porque podrían volverse adictos como el resto de nostros. La película sólo es recomendable para quienes ya están enganchados con la saga y sus personajes pues no hay introducciones ni tiempo para dar muchas explicaciones; la cinta definitivamente está hecha pensando en los seguidores fieles que ya saben que esperar de la serie.

Yo soy uno de esos seguidores y me fui de la sala de cine esperando con ansias la quinta entrega que ya estaría en pre-producción, y la probable sexta para completar la segunda trilogía, si se cumplen los deseos de Oren Aviv, el jefe de producción. Oren, yo te apoyo.

Lobo.

viernes, 8 de abril de 2011

Casino Jack (2010)

Otro caso basado en hechos totalmente reales, la historia de Jack Abramoff, el negociador de políticas que dejó al Capitolio patas arriba cuando cayó en una espiral de corrupción el 2006.

El trabajo del lobbyist es influenciar los votos de los políticos a favor o en contra de distintas causas, aceptando dinero a cambio y dando toda clase de regalos a estos políticos; ¿quién paga por todo esto? los mismos empresarios que necesitan esos votos a favor o en contra. Suena como una especie de soborno pero es algo completamente legal en los Estados Unidos; de hecho, el lobbyist vive de las ganancias que salen de estos dineros.

El problema en este caso fue que estos dineros alimentaron la avaricia del señor Abramoff y la escalada de mentiras, estafas y sobornos para obtener cada vez más terminaron en fraude y conspiración que no sólo le dieron 6 años de cárcel a Abramoff, sino a varios de sus asociados y a un par de congresistas.

Casino Jack es una cinta divertida y con buen ritmo, con un Kevin Spacey impecable y una historia real decorada con un poco de ficción creíble. Lo que más me extraña es la poca notoriedad que recibió la película a pesar de (¿o debido a?) tocar un tema tan delicado como es la corrupción dentro de los poderes del Estado. En cualquier caso hay que verla porque es uno de esos casos que hay que ver para creer.

Lobo.

domingo, 3 de abril de 2011

Los 33 de Atacama (2011)


Siguiendo con la temática "basado en hechos reales" llega a nosotros esta primera adaptación del fenómeno noticioso que tomó al mundo por sorpresa: los 33 mineros de San José que quedaron sepultados dentro de una mina a 700 metros de profundidad.

Ya es una especie de regla tácita: cuando sucede un fenómeno noticioso hay que adaptarlo y convertirlo en película para el mayor deleite del público. En el caso de los 33 la tarea es especialmente difícil porque una cinta de menos de una hora y media intenta comprimir los casi 70 días que duró la tragedia y ahí está su primera falencia. Sabemos que habrá más de una adaptación de la historia, pero este primer intento se queda corto en varios aspectos, partiendo por la duración que trata de abarcar tantos días de incontables dramas. Hubiera preferido un resumen de las primeras semanas, hasta que se logró el contacto, tal vez.

Pero el segundo y más grave error no fue su ambición, sino su falta de realismo. Para ser una historia completamente verídica el principal problema es que cambiaron los nombres de los mineros, muchas de las situaciones, e incluso agregaron un elemento extremo de peligro que nunca sucedió. Para los que somos chilenos y pudimos ver la noticia en primera fila esta co-producción española no es más que una versión ficticia que pretente mostrar de manera interesante un hecho que en realidad ya tenía suficientes elementos reales para hacer una buena película.

¿Se las puedo recomendar? Tal vez, si buscan un drama humano con aires de grandeza... Pero si quieren una historia verídica, mejor vean los documentales.

Lobo.

PD: Mención aparte el tributo de este señor: http://www.youtube.com/watch?v=ADv9TQLV1-0

miércoles, 30 de marzo de 2011

Ted Bundy (2002)

Muchas veces he pasado de largo la película American Psycho cuando la he encontrado por ahí; no me interesa ver la historia de sangre de un asesino ficticio que sólo existe para satisfacer a los fans del género. Prefiero mil veces conocer la historia real del hombre que inspiró ese libro y película, Ted Bundy.

Aunque el número de víctimas varía según las fuentes (19 confirmadas al momento de la sentencia, hasta 35 según algún investigadores), la verdad es que Ted Bundy era todo lo que la película muestra: un simpático y carismático joven con buena educación, buena apariencia y un sadismo enfermizo impresionante. Se acercaba a todas con su sonrisa infalible y cuando bajaban la guardia las golpeaba en la cabeza para así dejarlas inconcientes. El resto no lo puedo escribir en este blog.

Por supuesto, para los propósitos de contar una historia cinemáticamente interesante, algunos de los hechos están cambiados en su orden cronológico o simplemente fueron omitidos, y los nombres de las víctimas han sido cambiados. Aunque la película es de bajo presupuesto y no cuenta con un reparto célebre, la puesta en escena es interesante, las caracterizaciones son realistas e incluso la ropa y los autos de la época corresponden más o menos a los reales; investigando después averigué que el VW Escarabajo de Bundy no era amarillo, sino café claro y se encuentra en un museo en Washington.

No es una película para disfrutar, sino para educarse, para aprender acerca del fenómeno que representan los asesinos en serie, para recordarnos que a veces el tipo más agradable del mundo puede llevar un monstruo por dentro.

Lobo.

lunes, 28 de marzo de 2011

Ed Gein (2000)

Hace un año vi una serie documental del History Channel que retrataba a los más infames asesinos en serie de los Estados Unidos. Ahora he estado viendo algunas de las películas que muestran estos casos de la vida real de una forma bastante descarnada pero realista.

Ed Gein es un asesino especial porque sólo mató a dos (quizás 3) personas y por lo tanto no califica en verdad como un hombre que perseguía cierto tipo de víctimas. La razón por la que destaca en los anales de la criminología es el hallazgo de restos humanos en su casa; tazones para tomar sopa hechos con cráneos, una lámpara de huesos y otras cosas que prefiero no nombrar en esta página. Sólo diré que lo que encontraron en su casa después del arresto también pasó a la historia en varias películas que se han inspirado en él: Psycho, The Texas Chainsaw Massacre y Silence of the Lambs tomaron prestados diferentes elementos del criminal real.

Ahí es donde terminan casi todas las historias de Ed Gein, pero esta cinta es la primera que intenta mostrarlo como el hombre que era en verdad: traumado, mimado, débil, creyente, inseguro. Es una cinta de bajo presupuesto con actores desconocidos y una puesta en escena muy sencilla, pero con una actuación brillante por parte de Steve Railsback quien obtuvo varios premios en festivales de cine de terror y fantasía.

No es una cinta común ni fácil de encontrar, hay que verla casi como un documental porque ahí está su único encanto: servir como una forma de conocer la verdadera historia del "Carnicero de Plainfield" que se aproxima a la realidad como ninguna otra hasta ahora. Aparte de eso, es una película bastante mediocre.

Lobo.

domingo, 27 de marzo de 2011

127 Hours (2010)

Estoy pasando por una etapa realista en mi vida cinéfila; gracias a una combinación de suerte y coincidencia en este último tiempo he podido ver muchas películas basadas en hechos reales. 127 Hours es una película independiente realizada con "sólo" 18 millones de dólares que logró devolver a James Franco a las filas de grandes actores con futuros prometedores y nominaciones a toda clase de premios.

La historia de Aron Ralston es tan real y humana que en verdad se merecía su propia película, después de todos los documentales y el libro escrito por el mismo protagonista. En estricto rigor se trata de una historia muy simple: un amante de la naturaleza queda atrapado cuando una roca le apresa el brazo derecho en el fondo de un cañón en medio de la nada; apenas tiene un poco de agua, casi nada para comer y nadie sabe donde se encuentra.

No hay mucho que decir, sobre todo cuando ya sabemos el final de la historia gracias a los documentales y a las entrevistas que el mismo Aron ha concedido con los años desde que sucedieron los hechos. El verdadero motivo para ver la cinta es la actuación impresionante de James como el ingeniero exitoso que dejó atras esa vida para dedicarse a la aventura y a disfrutar la vida, sólo para encontrarse de cara con la muerte en uno de sus lugares favoritos en el mundo.

Una película demasiado recomendable para quienes gustan de las historias reales.

Lobo.

viernes, 25 de febrero de 2011

The Social Network (2010)


Por motivos que se escapan a mi control últimamente he estado viendo muchas películas "basadas en hechos reales". Obviamente eso quiere decir que toman elementos verídicos y los tergiversan de tal manera que al presentarlos sobre una pantalla se convierten en una historia interesante.

Es el caso de The Social Network, la historia sobre la creación de Facebook y los problemas legales que vinieron a causa de la disputa entre sus creadores y quienes los rodeaban. Según la cinta fue algo complejo y lleno de momentos dramáticos, pero según los protagonistas reales de la historia simplemente fueron largas noches comiendo pizza y varias noches de sexo con las estudiantes del campus. El drama legal y las peleas entre amigos fueron mayormente dramatizadas y exageradas porque la industria del entretemiento así lo exige.

El hecho es que Mark Zuckenberg no es un sujeto muy sociable pero sí muy inteligente; es capaz de hackear sitios de la Universidad de Harvard en estado de ebriedad y hacer enojar a su ex-novia via publicaciones en su blog, todo al mismo tiempo. De este talento informático llegamos a la idea de unos chicos ricos (es Harvard, después de todo) lo que desencadena una serie de eventos que culminarán con la creación del portal social más conocido del mundo. El problema es que al convertirse en una empresa exitosa, todos quieren recibir su rebanada del pastel.

No es un drama legal como Conviction, es una historia de jóvenes ambiciosos y soñadores que tuvieron algunas buenas ideas pero tomaron decisiones no tan inteligentes en algún momento. Algo verdaderamente rescatable es el guión, la forma en que está expuesto en la pantalla y la agilidad con que se presenta tanta información con diálogos rápidos y complejos. Al menos a mi me gusta eso, aunque para muchos será simplemente una película aburrida sobre niños ricos peleando por millones de dólares.

Lobo.

Sink the Bismarck! (1960)

La Segunda Guerra Mundial ha sido la inspiración de tantas películas que es imposible llevar la cuenta. Incluso ahora, a más de 50 años del fin del conflicto seguimos viendo producciones como The Pacific que relatan algunas de las tantas historias que se escribieron entre 1938 y 1945.

Sink the Bismarck! es una de ellas, y es una historia real. Los documentos y grabaciones que relatan la famosa orden del entonces Primer Ministro Winston Churchill fueron la inspiración para un libro (Los Últimos Nueve Días del Bismarck) que a su vez fue la inspiración para esta cinta que, si bien no es completamente fiel a los libros de historia, sí representa los hechos de manera realista y creíble.

Por el año 1960 la Real Flota Británica ya había retirado la mayoría de sus buques de guerra más viejos y en el proceso los productores de la película lograron conseguir el apoyo del Almirantazgo para usar un par de viejas naves como sets de filmación; todo ese apoyo ayuda a que la cinta se mueva dentro de varios frentes muy variados y realistas que hoy en día significarían costosas reconstrucciones. Podemos ver el cuartel de operaciones en Londres, algunas de las distintas naves que participaron en la operación Rheinübung y el puente del Bismarck donde el "villano", el Almirante Lütjens, amenza al mundo con "el buque de guerra más poderoso jamás construído". Esta debe ser la mayor falencia de la cinta, pues en su necesidad de crear a un Nazi malvado para servir de antagonista simplemente vilificaron la imagen real de un hombre que se oponía al exterminio racial y que en realidad no confiaba en la supuesta superioridad del acorazado alemán.

A pesar de ese detalle ficticio (junto con la inclusión de un Capitán Shepard, también ficticio), la historia no deja de ser interesante y la tensión se siente a la manera clásica de las antiguas películas de guerra. Me gusta la historia y el cine en blanco y negro así es que aproveché la oportunidad de verla y quedé felizmente satisfecho por una película sin fines propagandísticos que simplemente intentaba entretener con una lección de historia.

Lobo.

domingo, 20 de febrero de 2011

Unstoppable (2010)

Cuando te dicen que una película de Hollywood está basada en hechos reales ya sabes lo que eso significa: los hechos reales han sido modificados para agregar mayor emoción a la película. La mala noticia es que eso le quita realismo a la historia, pero la buena es que por lo general produce buenos resultados desde el punto de vista del entretenimiento.

Ese es el caso de Unstoppable, la quinta colaboración entre el director Tony Scott y el actor Denzel Washington, quienes logran nuevamente una historia de acción llena de emoción y suspenso cuando un tren de carga queda accidentalmente a la deriva, poniendo en riesgo la vida de miles de civiles inocentes; sólo la acción heróica de dos trabajadores del ferrocarril logra detener a "la bestia", el tren de un millón de toneladas que se convierte en el tercer protagonista de la cinta.

Aunque los hechos han sido un poco tergiversados (nadie murió en el incidente real) y otros exagerados (en realidad sólo habían 2 vagones con elementos tóxicos en lugar de 8), la historia tiene personajes carismáticos y una fotografía impresionante gracias al fanatismo de Scott por usar helicópteros para casi todas las escenas de acción. Sin ser una obra maestra, es una película entretiene y a mi me mantuvo en suspenso durante las escenas finales.

Aunque su papel es más bien secundario la bella Rosario Dawson también aporta con el único rol femenino en un mundo laboral dominado por hombres, el fascinante mundo de los trenes. Recomendable para los que gustan de la acción sin artes marciales ni efectos generados por computadora, y del suspenso basado en buenos movimientos de cámara. A mi me gustó mucho.

Lobo.

martes, 8 de febrero de 2011

Black Swan (2010)


Creo que la primera vez que la vi era una pobre huérfana con ganas de vengar la muerte de su hermano pequeño; le pide a su inesperado salvador que la entrene en el difícil arte de la "limpieza" (asesina a sueldo) y sin quererlo termina salvando el alma del frio matón que la acoge. En una entrevista de la edición especial de Leon: The Professional Natalie Portman cuenta como sus padres no tuvieron tantos problemas con dejarla interpretar a la no-tan-inocente Mathilda porque ya desde pequeña ella tenía claro su futuro: quería ser actriz.

En Black Swan creo que ella alcanzó un nivel de madurez actoral que ya muchas jóvenes desearían, y es que el rango del personaje es inmenso: de niña mimada e inocente a diva obsesionada, pasando por la rebeldía y los miedos de una ballerina que sueña con ser grande entre las grandes.

Ese sueño la lleva a ganar el papel más deseado por todas las bailarinas de su compañía, la Princesa Cisne, y entre celos, presiones y obsesiones la perfeccionista Nina descubre que el camino a la fama es mucho más tortuoso de lo esperado. El thriller psicológico me recordó por un momento a Perfect Blue por su mezcla entre lo real, lo irreal y lo surreal, cuando no sabemos si lo que ve Nina está en su cabeza o en el oscuro mundo artístico que la rodea, y un poco de investigación en http://www.imdb.com/ nos dice que Aranofsky compró los derechos de esa película japonesa para poder copiar una escena en el baño. A mitad de la película todo el tema de las realidades distorsionadas queda resuelto y sólo hay que esperar a ver el desenlace que ya se ve reflejado en los espejos desde un principio.

Por supuesto la Portman no podría llevar todo el peso de la película sola y por eso está muy bien acompañada por una exquisita Mila Kunis y un muy maldito Vincent Cassel (no lo veía desde Eastern Promises); la madre de Nina es interpretada por una talentosa Barbara Hershey, a quien yo nunca había visto. Ahora me queda esperar la comedia Your Highness para reirme un rato con Natalie.

Black Swan no es una película para todos, pero sí es una película para los que gustan de sus cintas bien contadas, sin escenas desperdiciadas y con el metraje exacto para contar lo que se desea, sin pérdidas de tiempo en desarrollos superfluos. La disfruté mucho casi sin saber de que se trataba, y esas sorpresas son siempre bienvenidas.

Lobo.

sábado, 5 de febrero de 2011

Skyline (2010)

¿A quién no le gustan las películas de invasiones extraterrestres? A mi me encantan; es divertido ver a la poderosa raza humana siendo subyugada por entidades más poderosas. Irónicamente Skyline es la primera de una invasión de películas con el mismo tema (se vienen por lo menos 7 cintas más con premisas similares durante el 2011 y 2012).

El principal problema con estas historias es que por lo general se van por caminos ya recorridos, con un personaje heróico, un futuro más que incierto para los humanos y un enemigo impresionantemente poderoso. Skyline no es la excepción, con la única diferencia que el héroe no es un militar condecorado ni un musculoso hombre de acción, sino un humilde neoyorkino de visita en Los Angeles que intenta sobrevivir al sorpresivo ataque alienígena.

La película de "bajo presupuesto" (10 millones de dólares) no cuenta con famosos en el reparto, excepto por el simpático Turk, de la serie Scrubs; los directores son dos hermanos expertos en efectos especiales y esa es en realidad la gran maravilla de esta película, con extraterrestres muy interesantes en su diseño y unas gráficas dignas de las películas de mayor presupuesto.

Aunque la trama no es novedosa y los actores se mueven entre la mediocridad y lo justo y necesario, la película entretiene porque tiene un excelente ritmo, con una muerte, explosión o alien en la pantalla a cada momento. Hay mucha acción, un poco de sangre y hasta algunas muertes bastante gráficas. El final es tal vez un poco más inusual de lo que quisiéramos, pero así es la ciencia ficción, totalmente impredecible.

Lobo.

sábado, 22 de enero de 2011

The A-Team (2010)

En algún momento a Hollywood se le acabaron las ideas y algún ejecutivo dijo "hagamos versiones nuevas de series o películas que ya fueron exitosas una vez"... Eso fue en los años '90s y ahora ya estamos tan acostumbrados a ver renacer antiguas franquicias televisivas que nada nos toma por sorpresa.

Lo bueno de esto es que ha permitido a los nostálgicos revivir viejos recuerdos y a los más jóvenes les ha permitido descubrir antiguos tesoros. Lo malo es que estas nuevas versiones no siempre están a la altura de los originales y ya hemos visto muchos fracasos tanto en la pantalla grande como en la chica.

Por suerte para todos nosotros The A-Team (Los Magníficos o la Brigada A) es un éxito en términos de entretenimiento: mucha acción, mucho humor, personajes fieles a los originales y suficientes elementos clásicos para recordarnos a la serie de los años '80s, pero a la vez suficientes detalles nuevos para modernizar la serie y presentarla a una nueva audiencia.

La película nos cuenta como se reúne esta brigada, forman su lazo de amistad y, de paso, conocen a un enemigo muy astuto que los convertirá en fugitivos de la ley (parte importante de la trama). Como ya no es una historia para la televisión hay más violencia, un poco de sangre y algunas "palabras inapropiadas", cosas que nunca se vieron en la versión original. De todos modos hay que entender que estos son personajes para el nuevo siglo, con una posible segunda parte (¿trilogía?) y que sin ser exactamente igual a la original tiene suficientes elementos para ser entretenida, como el buen cine de Hollywood.

Lobo.

domingo, 16 de enero de 2011

Tron: Legacy (2010)


¿Cuántos años tuve que esperar para que hicieran esta película? En realidad no vi la Tron original en cines en 1982, cuando tenía sólo cinco años de edad, la vi en televisión después. Sin embargo, eso no le quita la gran impresión que me causó porque para la época seguía siendo una experiencia visual y una verdadera revolución en términos de sus efectos especiales y conceptos futuristas sobre el manejo de información y la tecnología.

Se trata de uno de esos casos interesantes en que los propios seguidores de la cinta original lograron demostrar que había suficiente interés por realizar una segunda parte después de tantos años, por medio de campañas en línea y comentarios positivos ante un adelanto creado por un equipo independiente incluso antes de contar con el apoyo financiero de Disney, los dueños de la franquicia. Ese primer trailer causó tanto revuelo entre los fans que Disney no tuvo más remedio que aceptar financiar la secuela.

Esta vez el hijo de Kevin Flynn, Sam Flynn, se debe aventurar dentro del mundo virtual para averiguar que sucedió con su padre, he ahí el "legado" al que se refiere el título de la película. El resto de la sencilla trama lo deve descubrir cada uno al ver la película. No es tan revolucionaria como la original porque el 3D se está volviendo un poco aburrido y aunque los efectos, el aspecto y la música de Tron: Legacy son geniales, siento que su gran falencia fue no sacar verdader provecho de la tecnología RealD que la misma Disney estrenó con Chicken Little.

Descontando el pobre uso del 3D, creo que Legacy no es una mala película, pero tampoco pasará a los anales de la historia del cine por ser innovadora; quizás en muchos años más la recordemos por otro interesante detalle: ser la primera película musicalizada por el dúo electrónico Daft Punk, quienes realizaron la banda sonora con exquisitos arreglos orquestales y ochenteros sintetizadores. Llevo semanas escuchando la música de la película y todavía no me canso de ella.

Lobo.

miércoles, 12 de enero de 2011

Micmacs à Tire-Larigot (2009)

A Jeunet se le puede tildar de sobre-imaginativo o de auto-indulgente, pero lo excéntrico de su alegre personalidad no le puede quitar mérito a sus impresionantes películas. El director auto-didacta de la archi-famosa Amélie nos presenta esta vez Micmacs, una loca historia de venganza que comienza de manera magistral: en menos de cuatro minutos conocemos toda la historia de Bazil, lo que sirve como introducción a un desafortunado accidente cuando una bala se aloja en su cerebro, que lo lleva a conocer a una "familia" de personajes con talentos bastante únicos.

Desde ahí, toda la historia está llena de las famosas y cuidadosas escenas surrealistas que Jeunet acostumbra regalarnos, con pequeñas viñetas animadas, efectos visuales obvios que no intentan pasar por reales, y por supuesto la prescencia de su buen amigo Dominique Pinon, infaltable en casi todas sus películas.

No importa si nos lleva a pasear por una ciudad húmeda y oscura (La Cité des Enfants Perdus) o si nos hace correr por nuestras vidas delante de los afilados dientes de unos extraterrestres asesinos (Alien: Resurrection), Jean-Pierre Jeunet tiene un don inigualable para transportarnos a lugares que sólo existían en su cabeza.

Micmacs es una película altamente recomendable para las personas de mente abierta y con imaginación; es de esas cintas que hay que "ver para creer".

Lobo.